Por Sheilla Cohen.

Beatriz Morales (1981, Ciudad de México) combina un enfoque expresionista abstracto con componentes figurativos e ilustrativos, así como una fuerte dimensión de investigación sobre las relaciones de color. Sin embargo, en los últimos años su cuerpo de obra se ha transformado en dimensiones monumentales, instalaciones escultóricas de textiles teñidos con técnicas ancestrales mexicanas que de alguna manera retoma sus raíces como diseñadora de moda y procesos ancestrales que se realizan en su país de origen.

La artista autodidacta, radicada en Berlín, dejó su país natal desde hace doce años después de haber estudiado Diseño de Moda, para estudiar arte.

“El arte, como para muchos artistas, ha sido un medio o vehículo para poder expresarse, para decir cosas que no se pueden comunicar en palabras verbalmente, como un proceso catártico. En ese sentido, el arte fungió en un principio como un proceso terapéutico, y después de haber sacado todo lo que tenía que decir, sabía que tenía que dar el siguiente paso para asumirlo como una profesión, entonces empecé a estudiar historia del arte y a experimentar con diferentes técnicas.”

KAAN / KIHAAB’, Museo de Arte Contemporáneo Ateneo de Yucatán (MACAY), 2020.
Foto: Chiara Bonetti

En la Academia de Arte de Florencia decidió estudiar las bases del dibujo anatómico hasta perfeccionarlo para después desaprenderlo. Se metió a múltiples cursos de diferentes cosas que le interesaba aprender como fresco, cerámica, grabado, etc. Fue discípula de varios artistas en sus talleres, y años después se fue a vivir a Berlín a una residencia de artistas que duraba tres meses.

“En el momento en el que llegué a Berlín me sentí como pez en el agua, porque todos los que vivían en ese barrio eran artistas y no podía desaprovechar ese romanticismo que hay en el arte, en el cual todos trabajamos por el amor a la belleza, por transmitir un concepto, sonidos, colores. En Alemania hay mucho más apoyo para los artistas y empezaba a cambiar esta idea de que necesitabas tener una licenciatura y maestría para aplicar a becas, residencias artísticas, y talleres. Irónicamente en aquella época, tanto en México como en el resto del mundo, la educación artística era todo lo opuesto, iba en contra de lo figurativo e iba dirigido hacia lo conceptual, lo cual no le interesaba en lo absoluto, porque yo necesitaba aterrizar todas esas imágenes que tenía en mi cabeza.”

Sounds I’ll Never Hear II
Foto: Chiara Bonetti

Recientemente, fue invitada al Museo MACAY en Mérida, para presentar su primera exposición institucional individual en su país de origen. Para “Planos Disfrazados” Morales creó una instalación monumental inmersiva que reinterpreta las técnicas y materiales artesanales mexicanos tradicionales a través de su estilo característico, brillante, neo-abstracto-expresionista, marcando una gran transformación en su práctica artística.

La exposición constaba de dos componentes principales: KAAN (piel de serpiente) y KIHAAB (fibra de agave) en maya. La obra combina materiales naturales tradicionales y grandes «pieles» de pintura acrílica, un cambio en la forma en que la artista se acerca al color y la escala. Un gran tapiz de fibra de cactus en tonos pastel sirve de telón de fondo para las láminas de pintura de neón artificiales que crean una sorprendente yuxtaposición de materiales. La instalación iba acompañada de un video, en el que vemos a ‘KAAN / KIHAAB’ interactuando con el entorno local.

KAAN / KIHAAB’, Museo de Arte Contemporáneo Ateneo de Yucatán (MACAY), 2020.
Foto: Chiara Bonetti

Las amplias vistas aéreas de extensos paisajes se entrelazan con el despliegue de estas gigantescas piezas coloridas, que reúnen tres influencias: la cultura, el paisaje y las tradiciones artesanales mexicanas. Hablamos con Beatriz Morales sobre su alejamiento del lienzo y el proceso de transición que está atravesando su práctica artística.

Tu práctica artística parte de un proceso de investigación del tratamiento de los pigmentos que hace referencia a lo histórico y a tu historia personal, en particular tu identidad ¿De qué manera consideras que tu ascendencia mexicano-libanesa y el haber vivido en Berlín doce años, ha influido en tu obra y práctica artística?

Creo que en mi caso el ser mexicana de origen libanés ya me coloca en un rico contexto cultural, el hecho de vivir en Berlín agrega aun más complejidad al vínculo territorial y al sentimiento de pertenencia. Mi practica artística se ha visto empapada de este vaivén. Los cuales son temas recurrentes no solo en mi obra sino en mi cotidianidad. La inspiración es solo el resultado de todo lo que mezclan ingestas.

Sounds I’ll Never Hear II
Foto: Chiara Bonetti

Eres una artista autodidacta, ¿cómo surgió es inquietud por crear y por qué decidiste dedicarte a esto?

Empecé pintando durante las noches cuando todos en mi casa dormían, o en “secreto” para mi el dibujar o pintar era algo privado y muy mío y nunca tuve un verdadero interés por cortar con esa relación. Me acerqué a varios maestros para obtener las herramientas necesarias para poder continuar en lo que en su momento me fuera útil, pero nunca me pude sentar en un salón de clases para aprender arte.

El ser una artista autodidacta tiene sus pros y sus contras, creo que el haber estudiado en una escuela de arte, además de la formación te permite tener más contactos dentro del medio del arte, sin embargo, el haberlo hecho yo todo sola me da la flexibilidad y libertad de experimentar con medios, técnicas, necesidades e intereses que voy teniendo sin tener que hablar desde un mismo lenguaje y tampoco de responder a una demanda de un mercado que me quiere encasillaren un estilo y/o formula que sea más comercial como una marca. El punto es encontrar el equilibrio sin repetirte, por ejemplo; a veces siento que me auto-saboteo porque de repente creo un estilo que se vendió muy bien e inmediatamente me canso y ya quiero hacer otra cosa porque ya logro su objetivo.

Al principio no me sentía lista para enseñar mis obras, y lo que cambió un día, fue que finalmente dejé de buscar esa perfección y me quité la presión de que todo lo que hacía tenía que ser una obra maestra, así fue como empecé a compartir y mostrar los procesos de lo que me interesa –el color y la textura– como lo hago hasta la fecha.

Mother
Foto: Dorian Ulises López Macías

Recientemente, tuviste un solo-show KAAN- KIHAAB en el Museo MACAY en Mérida en la cual tomaste Exposforo, un espacio de 700 m2 en el cual expusiste un nuevo cuerpo de obra compuesto por; pinturas, video-instalaciones y textiles de gran formato. Cuéntanos acerca de la concepción y proceso detrás de esta exposición individual que marca una transición en tu cuerpo de obra.

Recibí la invitación del Museo MACAY en enero 2019, me preguntaron si estaría dispuesta a exponer en un espacio tan grande, en lo personal me encantan los retos y seguir probando cosas nuevas, así que acepté. Lo que me dio seguridad es saber que tenia carta blanca. Para mi esa exposición me dio la oportunidad de poder mostrar varias facetas de mi trabajo.

KAAN / KIHAAB’, Museo de Arte Contemporáneo Ateneo de Yucatán (MACAY), 2020.
Foto: Chiara Bonetti

Dicen que tu pintura inicia con una mancha: un gesto de negación, pero también de creación. ¿Cómo describirías tu proceso creativo?

Siempre ha tenido que ver con las manchas, ahí empieza el reto de organizarla, es un ir y venir para entender su dirección y lo que la pieza necesita. Me considero una persona muy callada y de estar en silencio, eso me permitía observar mi alrededor y fijarme en los patrones del suelo, el techo, los muros y siempre veo esas manchitas y de esas manchitas empiezo a crear composiciones y a incorporar colores. Es como la vida misma, inicia con acto de energía casi violento.

¿Cómo explicarías la transición por la que ha atravesado tu práctica de la pintura bidimensional figurativa, al expresionismo abstracto para terminar haciendo instalaciones escultóricas tridimensionales de gran escala?

La pintura de bastidor tiene un poder abismal, aun así, siento la necesidad de expresarme utilizando otros materiales, como las fibras, pieles de pintura, video, sonido. Sigo pensando como pintora aun cuando mis piezas son tridimensionales. Por ejemplo; ahora “pinto” con fibra de agave colorada y la aplico sobre yute creando pinturas gigantes. Es difícil describir mi transición sin embargo para mi tiene todo el sentido.

Foto: Amanda Holmes

El textil ha tenido un resurgimiento en el arte contemporáneo en los últimos años. ¿A crees que se debe esto?

En mi opinión tiene que ver con dos cambios fundamentales que se han ido desarrollando en las últimas décadas. El primero es el reconocimiento prácticamente nuevo dentro de la historia del arte a las mujeres como artistas. Si a eso le sumamos que al arte textil se le ha relacionado como un oficio para mujeres, no me sorprende que la presencia del arte textil tome más presencia actualmente. Es un camino que comenzó a abrirse en los años 20 del siglo pasado a cargo de la pionera Gunta Stölzt primera innovadora en el arte del tejido a mano y maestra de la Bauhaus.

Por otro lado, hombres artistas más reconocidos mundialmente, se han atrevido a adoptar esta tecnología milenaria como su medio, El Anatsui, Faif Ahmed, Gabriel Dawe, por nombrar algunos.  Con esto quiero decir que el arte textil se posiciona por fin dentro del arte contemporáneo libre de género y explorando nuevos contextos y conceptos.

¿Te dejas llevar por al accidente y la intuición o tienes una idea preconcebida de lo que vas a crear cuando estas frente al lienzo en blanco?

Un lienzo en blanco tiene un poder intimidarte, pero al mismo tiempo es una invitación a crear el mundo que quieras. Mis ideas son definitivamente preconcebidas aun tengan como ayudante al accidente.

Sounds I’ll Never Hear II
Foto: Chiara Bonetti

La historia, la naturaleza, los pigmentos y materiales ancestrales como fibras de agrave, el algodón o yute son elementos esenciales en tu obra. ¿Qué otras referencias podemos encontrar?

La ruina, la idea de lo que fue o pudo ser es una referencia que une mis tres ciudades, Ciudad de México, Berlín y Beirut. Cada una tiene una historia e origen muy diversos pero siento que tienen ese punto en común y es en esa ruina. Objetos que se descarapelan y dejan al desnudo su pasado uniéndolas a un presente y reinventándose continuamente.

Tiendo a ver mi trabajo como un proceso continuo. Mi sed de probar nuevos materiales, formatos y estados de ánimo son el núcleo de mi práctica, mi interés no radica en un solo truco o una repetición constante, por el contrario, tiendo a probar cosas diferentes. Me gusta comparar mi practica con capítulos de un libro. Rescató temas o técnicas que ya he utilizado siempre y cuando me ayuden a desarrollar una historia interesante.

Foto: Dorian Ulises López Macías

De alguna manera, la transición del lienzo a lo textil es una forma de regresar a tus orígenes y raíces como mexicana y diseñadora.

Nací entre telas, mi papá tenía una fábrica de ropa, siempre que lo visitaba mi hermana y yo jugábamos con los textiles. Teñir es como hacer un pastel, que todo mundo sabe teñir, pero cada uno tiene su receta y sabe diferente. Y yo quería aprender a hacer teñidos con métodos y procesos ancestrales mexicanos. En lugar de dar brochazos, literal voy cosiendo piezas de ese color hasta formar una composición.

El textil y el pigmento son como otro órgano del cuerpo; una segunda piel que habla. ¿Qué mensaje buscas trasmitir o historia quieres contar al espectador a través de tu obra?

Kaan ( serpiente en Maya ) es una pieza que esta conformada por 60 m² de pintura sin bastidor. Son capas de color una tras otra hasta formar una textura similar a una piel sintética. Las piezas bailan sueltas, haciendo referencia a una piel de una serpiente recién mudada. Alegorías acerca de la piel han estado presente en otras series de mi obra como ‘Ruin Porn”. El concepto de la piel me parece fascinante, y atinada en muchos aspectos la piel se adapta, conecta al individuo con el medio ambiente, pero también protege lo que no es visible pero perceptible.

KAAN / KIHAAB’, Museo de Arte Contemporáneo Ateneo de Yucatán (MACAY), 2020.
Foto: Chiara Bonetti

Hay un aspecto háptico en tu obra que despierta en el espectador esa necesitad intrínseca de tocar las texturas. ¿A qué motivo crees que se debe esto?

La materialidad en la obra es algo que me interesa compartir, parto mucho de la idea de dependencia de la superficie y el núcleo. Mi obra esta formada por capas que no son visibles para el espectador sin embargo yo creo que esa energía es quizás lo que provoca al espectador querer investigar o descubrir por medio de las ganas de tocar la pieza.

¿Qué diferencias notas entre la escena artística en Berlín a la de la Ciudad de México?

Llevo viviendo en Berlín trece años, y las diferencias son cada vez menos. Siento que en México han aumentado las posibilidades de espacios expositivos siguiendo varios modelos extranjeros, al mismo tiempo cada vez más son los artistas extranjeros que han decidido adoptar a México como su lugar de producción y residencia. Todo esto pone una brecha muy corta entre lo que pasa aquí o ahí.

Sounds I’ll Never Hear II
Foto: Chiara Bonetti

Acabas de dar a luz recientemente. ¿De qué manera la maternidad o el hecho de ser mujer en un mundo dominado por hombres ha afectado o influido en tú práctica artística o en tu posicionamiento como artista en el mundo del arte?

Di a luz en un año pandémico, así que no noté cambios en mi agenda. Por el momento el cambio principal en mi vida como artista es que mi tiempo en el estudio es menor por lo cual mis decisiones son más prácticas y más seguras. No hay tiempo perdido.

Por último, siendo una artista visual que trabaja directamente con los pigmentos ¿qué simboliza el color o la ausencia de éste y qué emociones despiertan en tu interior?

Los colores es un tema muy complejo y me lo tomo muy en serio. La relación emocional que tenemos en su mayoría es muy impuesta y nos a alejado de poder tener una relación más estrecha y autentica con su energía. Es decir, tenemos las letras de un abecedario, pero sabemos leer muy pocas palabras.

KAAN / KIHAAB’, Museo de Arte Contemporáneo Ateneo de Yucatán (MACAY), 2020.
Foto: Chiara Bonetti

@moralesberlin

http://www.beatrizmorales.com/