Por Sheilla Cohen.
Archivos, carpetas y libretas de trabajo están cuidadosamente colocadas
en las estanterías de su estudio, en cada una de ellas se puede encontrar el registro de la conceptualización y ejecución de sus obras. A diferencia de otros artistas, Isauro Huizar (Culiacán, Sinaloa, 1985) no busca producir un nuevo objeto o imagen, sino ofrecer otro sentido para los que ya existen, a partir de una cíclica y rigurosa disciplina de producción.
De tal manera, su multidisciplinaria obra no solo nos invita a ver las cosas de una forma distinta, sino que nos propone relacionarnos de otras maneras con los elementos de nuestra cotidianidad. El proceso del artista sinaloense, actualmente representado por la Galería Enrique Guerrero, se rige bajo el concepto de la “economía de la existencia”, un modo de vivir que recurre a estrategias para agrupar, clasificar y documentar de manera obsesiva los objetos que lo rodean.
Por una parte, su obra es el resultado de recolectar y organizar los elementos que encuentra, por otra, de economizar, reciclar y re-significar los medios que están a su alcance. Entrevistamos a este metódico artista para conocer más acerca de su carrera.
¿Quién es Isauro Huizar?
Me considero un artista visual, aficionado a los hábitos, organizador compulsivo, atleta amateur, respirador defectuoso, una máquina descompuesta.
Cómo definirías lo que haces en una frase?
Realizo sistemas para comprender lo que sucede a mi alrededor. Motivado por el afecto, organizo, acomodo y trabajo con los objetos, los espacios y sus relaciones por medio del cuidado y la atención.
¿Dónde encuentras la inspiración?
Me maravilla la vida cotidiana, mis rutinas, los residuos encontrados, todo aquello que guarda una dedicación y un trabajo bien logrado. Se podría decir que para mi trabajo, voy juntando la inspiración y cuando la idea me parece lo bastante nutrida, la ejecuto o la comienzo a impulsar como proyecto.
¿Cómo describirías tu proceso creativo?
Mi proceso para trabajar se basa en producir y actualizar sistemas; utilizo estrategias de apropiación, recolección, organización, intervención, y alteración de materiales, motivado por el cuidado y el afecto en la vida cotidiana. Realmente paso mucho tiempo en el escritorio (análogo o digital), realizo muchos bocetos análogos y digitales, también fotomontajes e impresiones.
Cuando voy tomando seguridad en la idea procedo a la ejecución de exploraciones y así sucesivamente hasta obtener un resultado satisfactorio. Tengo un método de trabajo que parte de las ideas para realizar exploraciones bajo el hábito del registro y documentación en libretas y carpetas. Mantengo un archivo de libretas: personales, de notas, de conceptos y de producción; también uno de carpetas: para los proyectos en curso.
¿Con qué frecuencia creas una obra y cómo sabes cuándo está terminada?
Siempre estoy trabajando y explorando ideas, definir cuándo está terminada una obra puede ser difícil por que tiene que ser puesta a prueba al presentarse y someterse al paso del tiempo, así que presento muchas cosas que no consideraría estrictamente terminadas pero si bien hechas, valorar una idea o proyecto como terminado viene con el tiempo.
Mi método de trabajo me permite ir desarrollando ideas como si fueran una bola de nieve, como las que vemos en los dibujos animados, que va avanzando en caída y por la gravedad va creciendo. Por ejemplo, el proyecto El origen proviene de los límites una exhibición comisionada y curada por KRSTO para Chalton Gallery en Londres, el trabajo lo presenté el 2018, sin embargo las primeras ideas surgieron en el 2012, según tengo registro. Trabajo de esa manera, voy alimentado ideas y cuando me parece que están suficientemente nutridas desarrollo exploraciones hasta llegar a una ejecución final.
¿Cómo ha ido evolucionado tu obra en el curso del tiempo?
Mis piezas se entrelazan como un tejido. Se encuentran en un estado de continua palpitación, en una contracción y expansión constante, me enfoco en los proyectos como núcleos alternando entre ellos de manera lateral, similar al funcionamiento de las células que por grupos, nacen, crecen y se reproducen; esto a diferencia de pensar los proyectos como una evolución o progreso lineal, con un comienzo, desarrollo y desenlace único.
Tu cuerpo de obra propone una nueva forma de ver. ¿Cómo ve la vida Isauro Huizar y cómo te relacionas con los objetos que te rodean?
Sistemas, todos los objetos son sistemas (que son parte de otros sistemas). Estoy obsesionado con los sistemas, planteo un sistema para todo, para la producción de cada proyecto (métodos, herramientas y materiales), para el archivo de mis ideas (libretas y carpetas, análogas y digitales), para mi vestimenta (tres pantalones y seis camisetas, en color negro), para mi alimentación (una dieta suficiente para la nutrición y energía), etc. Sistemas. También veo mi vida y práctica como una transfiguración de mis actividades recreativas y de descanso en trabajo artístico.
Por último, a veces resumo la vida como una lista (otro sistema) interminable de actividades por hacer que esta cambiando constantemente: enlisto, elimino y agrego actividades sucesivamente. En el proceso van apareciendo nuevas actividades y la constante es ir depurando. Por ejemplo: una actividad de la lista podría ser “no hacer nada”, lo cual es muy difícil de conseguir. Siempre termino haciendo algo.
¿Cuál es el comportamiento del objeto en el espacio?
Esa pregunta la plantee para la exposición Espacio-Objeto-Comportamiento en Biquini Wax EPS, en 2015, y fue detonada por el diálogo con Daniel Aguilar Ruvalcaba. quien fundó el espacio y lo coordinó en ese entonces. Lo hice de manera retórica, no para conseguir una respuesta, sino para disponer de ella como herramienta para trabajar. Existen muchos, habrá algunos más eficientes que otros, dependiendo del uso del sujeto que se encuentra habitando el espacio. Algunos funcionan mejor para ciertos propósitos y esas relaciones son las que me interesa encontrar.
Mucha de tu práctica artística consiste en apropiar, recolectar, organizar, intervenir y alterar los elementos que te rodean, ¿me puedes contar más al respecto?
Estos términos son para mí estrategias de trabajo a las que recurro motivado por el afecto hacia los objetos y los espacios. La intención principal es desplegar atención y cuidado sobre estos elementos para ofrecer una asimilación más profunda del momento presente. Me interesa mucho que los espacios y objetos se vean bien, no para que resulten bonitos, sino para que se puedan entender mejor.
Hay dos términos japoneses que me gustaría mencionar para completar lo anterior, el primero es “ma” que podría traducirse como pausa, espacio, abertura o intervalo. Un espacio consciente que permite poner en valor las otras partes de la obra o crear nuevos significados. Según la filosofía japonesa, ese espacio estaría lleno de energía y podría inducir un estado contemplativo en el cual es posible apreciar la expansión del espacio y del tiempo. El segundo término es “satori” que significa un momento de no-mente y de presencia total, y designa la iluminación en el budismo zen.
Podrías contarnos más acerca de tu proceso de producción, específicamente; ¿a qué te refieres con “economía de la existencia”?
Para mí es una manera de vivir, se trata de practicar una “economía de la existencia”, por esto quiero decir: recurrir a una economía de medios tomando en cuenta los aspectos característicos de un lugar o una situación. Una imagen para ilustrar lo anterior: una colega me preguntó, “¿cuánto gasto en materiales al mes?” Mi respuesta fue, “depende de que quiero hacer”, trabajo por ideas o proyectos, evito visitar una tienda de materiales y comprar según mis impulsos, para mí sería como surtir despensa sin una lista y con hambre.
Me resulta más conveniente pensar en qué necesito según ciertas ideas a explorar, tal vez requiero visitar un tiradero de basura o un parque en vez una tienda de materiales. Otra anécdota que recuerdo es del 2014, cuando trabajaba en diseño de interiores por las mañanas y estudiaba en el Programa Educativo SOMA por las tardes, los tutores del programa exigían demostrar un progreso en la producción de arte y al no tener más tiempo, ni taller, ni presupuesto, comencé a preguntarme cómo podría producir un proyecto con las actividades cotidianas que ya estaba realizando día con día y así surgió Recorridos sobre la superficie de un cuerpo una colección de setenta jabones usados por mí durante dos años que presente en el 2016 en Casa Maauad, un espacio de exhibiciones coordinado por el artista Anuar Maauad.
Trabajas con múltiples medios y soportes con ¿cuál te sientes más cómodo? o ¿cuál es el que utilizas con mayor frecuencia?
Mis medios son la imaginación, las manos, el cuerpo y la mente. Leer y no hacer nada (ocio) también son medios importantes para mi.
¿En qué estás trabajando ahora o qué podemos esperar próximamente de Isauro Huizar?
He comenzado a escribir más, estoy participando en un taller de poesía y narrativa coordinado por Milagros Rojas y Catalina Berarducci, en la Librería Escandalar y también en el proyecto de Escucha y Texto de Sandra Sánchez para que los artistas y productores dialoguen y escriban sobre su trabajo o el de otrxs, en este último recientemente terminé un proyecto titulado “Me aburre hablar de arte”.
¿Qué libros te han marcado más en tu vida, si tuvieras que recomendar alguno cuál sería?
Recomendaría leer libros que no sean de arte. Algunos autores que me interesan son Alain de Botton, D.T. Suzuki, Vinicius de Moraes y Dale Carnegie. Soy muy aficionado a la literatura zen hay un libro que se llama El libro del Té de Okakura Kakuzō que narra como son las ceremonias del té y te revela pensamiento detrás de la cultura japonesa.
Desde los pequeños detalles, la asimetría en las composiciones, hasta la austeridad de elementos por mencionar algunos. Tengo referencias muy diversas, por otro lado, tengo la afición al desarrollo personal, Dale Carnegie es un autor estadounidense de libros que tratan sobre relaciones humanas y comunicación eficaz.
Un capítulo de uno de sus libros es “Sonreír”, y narra cómo este gesto beneficia las relaciones entre personas. También ofrece un método para realizar una crítica constructiva donde te invita a tratar primero de descubrir y mencionar tres virtudes hacia la persona en crítica y, posteriormente, ofrecer las fallas como un área con posibilidades a mejorar, en lugar de comenzar por reprobar completamente a la persona.
Cuando leí esto, inmediatamente pensé que también puede aplicarse en el entorno del arte, para abordar el intercambio de ideas, pero también a los discursos y producciones. Hay otros libros que me interesan como ensayos cortos, entrevistas y escritos de filósofos, poetas, artistas, arquitectos, diseñadores entre otros. Para mí, este tipo de material es increíble, los tomo como consejos y sugerencias para mi trabajo y discurso, me apropio de muchos y los adapto según mis intereses.
¿Cuál es tu motto o lemas de vida?
«Entre menos tengo, menos necesito.»
«La necesidad agudiza el ingenio.»
«Las palabras convencen, pero el ejemplo arrastra.»